Certificación de una empresa de confección textil de exportación, en un programa de buenas prácticas de manufactura y los principios de ISO 9000

Abstract

La industria de confecciones textiles, dirigida al mercado de exportaciones, debe satisfacer altos estándares de calidad en sus productos y procesos, también deberá alcanzar niveles óptimos de productividad, costos y efectividad en los tiempos de atención de sus compromisos. Esto le permitirá mantenerse en el mercado en el largo plazo, con base en la reducción de costos, incremento de los ingresos y aumento de los índices de rentabilidad, ser una organización predecible, enfocado en sus fortalezas. Todo esto se logra cuando se estudia y analiza en detalle las diferentes interfases que conectan la organización, los procedimientos internos que dan soporte a cada una de estas, son aspectos esenciales de una evaluación seria y rigurosa, que coadyuve a la optimización integral de los procesos. Dentro de un proceso de estudio de la conectividad y eficacia internas, destaca la estandarización de las actividades que componen un proceso determinado, que permita una ejecución limpia de tareas que no generen valor, clara y definida, que reduzca los tiempos de ejecución e incremente la calidad de la actividad. Los principales soportes de la estandarización de los procesos internos de una organización, son las certificaciones a diferentes niveles; de proveedores, de clientes y de colaboradores; adicionalmente, las buenas prácticas de manufactura, así como los principios ISO 9000. En conjunto, permiten implantar un proceso de mejora continua, como ha sido el caso de la empresa en estudio. La aplicación sistemática de los principios de la certificación, dirigido a los procesos productivos, permitieron obtener resultados favorables a nivel comercial, operativo y financiero. A nivel comercial, por el incremento sostenido de las ventas a partir de la obtención de la certificación, pasando de US$9.67 millones en el año 2015, a US$11.42 millones en el siguiente año, alcanzando US$13.18 millones y US$14.55 millones en los siguientes dos años. Los gastos de ventas se redujeron de 12% en el año 2015, a 8% en el 2018. A nivel operativo, los costos generales de ventas, asociados al producto, se redujeron notablemente a partir del año 2015 en que registró 72.08%, alcanzando 70.15% en el año 2016, mientras que, en los años 2017 y 2018, registraron 68.13% y 65.48% respectivamente. En el plano económico financiero, los gastos financieros disminuyeron de 4% a 3% en los tres últimos años de estudio, mientras que la utilidad neta se incrementó gradualmente durante el período de estudio, pasando de 2.70% en el año 2015, hasta obtener en los años 2017 y 2018, 9.70% y 12.30% respectivamente. Si lo expresamos en valor monetario, los beneficios obtenidos en los dos últimos años, registraron US$1.28 millones y US$1.78 millones.