Las estrategias de poder durante el contexto Wari: el caso de Pachamarka

Abstract

Las estrategias de poder en Pachamarka se reflejan en su arquitectura, cuyo diseño revela relaciones con la capital Wari, donde la interacción estuvo marcada por el intercambio bajo lógicas del antiguo mundo andino. Los constructores de Pachamarka asimilaron elementos de la arquitectura Wari, combinándolos con sus propios diseños locales, resultando en un edificio con la distintiva planta arquitectónica en forma de "D". Este tipo de construcciones proporcionó un prestigio social que distinguió a Pachamarka en comparación con otros sitios contemporáneos, y le dio un rol protagónico en las dinámicas socioeconómicas entre las diversas ecozonas de los valles de Pampas y Apurímac, en la sierra central sur de los Andes orientales. Estas afirmaciones se dan luego de un trabajo que incluyó una prospección pedestre, un levantamiento planimétrico y la excavación de cinco unidades, que permitieron determinar que Pachamarka fue un sitio Wari de arquitectura rural donde la población acumuló poder a través del intercambio de bienes y conocimientos entre la élite local y la élite ayacuchana. Esta interacción debió respaldarse en la necesidad de consolidar la ruta de la capital Wari hacia Espiritupampa, atravesando Jarqampata, Pachamarka y Llaullaku. La elección de este asentamiento fue estratégica: en su primera ocupación, Pachamarka fue multifuncional porque funcionó como un asentamiento doméstico que a su vez albergó temporalmente a las personas en el diseño de habitaciones-patios, donde se hallaron restos de cerámica de estilos Wari. Estos hallazgos fueron corroborados por fechados de radiocarbono, calibrados entre los años 706 - 988 d.C. Finalmente, en su segunda ocupación (calibrados entre 1281 - 1398 d.C), el sitio fue reutilizado como espacio funerario en el contexto del culto a los ancestros, legitimando así el poder de la élite de Pachamarka ante otros grupos afinesThe power strategies at Pachamarka are reflected in its architecture, whose design reveals links with the Wari capital, where interaction was marked by exchange under the logic of the ancient Andean world. The builders of Pachamarka assimilated elements of Wari architecture, combining them with their own local designs, resulting in a building with a distinctive "D"-shaped architectural plan. This type of construction provided a social prestige that distinguished Pachamarka compared to other contemporary sites and gave it a leading role in the socioeconomic dynamics between the various ecozones of the Pampas and Apurímac valleys, in the south-central highlands of the eastern Andes. These findings are based on work that included a pedestrian survey, a planimetric survey, and the excavation of five units, which allowed us to determine that Pachamarka was a Wari site of rural architecture where the population accumulated power through the exchange of goods and knowledge between the local elite and the Ayacucho elite. This interaction must have been supported by the need to consolidate the route from the Wari capital to Espiritupampa, passing through Jarqampata, Pachamarka, and Llaullaku. The choice of this settlement was strategic: during its first occupation, Pachamarka was multifunctional because it functioned as a domestic settlement that also temporarily housed people in the courtyard-room design, where Wari-style ceramic remains were found. These findings were corroborated by radiocarbon dating, calibrated between 706 - 988 AD. Finally, during its second occupation (calibrated between 1281 - 1398 AD), the site was reused as a funerary space in the context of ancestor worship, thus legitimizing the power of the Pachamarka elite vis-à-vis other related groups.